La Carga Histórica del Brassiere

La forma original del brassiere dista mucho de la prenda íntima que conocemos hoy en día. Actualmente el diseño anatómico para su comodidad, así como las telas suaves al contacto con la piel, la diversidad de formas y los femeninos detalles en su elaboración son elementos comunes pero, no siempre fue así. Corría el siglo XVII cuando los soldados franceses se convirtieron en los pioneros del brassiere. Las tropas utilizaban esta prenda, que consistía en una pieza dura sobre el pecho debajo de la armadura, únicamente para protegerse de ataques enemigos. Más tarde, con el objetivo de engalanar la figura femenina (marcar la cintura y realzar los senos) su uso se extendió al sexo femenino.

El primero modelo de brassiere –que consistió en lo que hoy conocemos como corsé– se lo debemos a reina de Francia, Catalina Demedicis quien prohibió mostrar una cintura ancha en las fiestas reales. Luego de más de 300 años de la tortura de utilizar corsé, el concepto de brassiere sufrió modificaciones y se acercó a la prenda que se utiliza hoy por hoy. Aunque no se sabe a ciencia cierta quien fue el responsable de la creación de este pieza de ropa interior femenina, la mayoría de las teorías le atribuyen el invento a la francesa Hermine Cadolle en el año de 1889. De ahí en adelante se popularizó gracias a importantes símbolos de la moda como Marilyn Monroe y Madonna, quienes mostraron esta prenda de forma irreverente y sensual. Modelos para diferentes tipos de cuerpos y tamaños, así como para necesidades específicas (aumentar o disminuir el volumen, mayor soporte para hacer ejercicio, entre otras), surgieron más adelante dándonos a todas las mujeres la posibilidad de exaltar nuestra silueta. La próxima vez que estés por colocarte el brassiere, piensa en lo maravilloso de este invento que reúne tantos siglos de historia tras su diseño.