Gallo de Pelea


Sábado noche. Solo me apetece desempolvar  mi vieja play station 2 y echar unas partidas al pro 8. Un clásico. Un juego de culto. Mi liga con el Almería va viento en popa, y a falta de 8 jornadas ya tengo la permanencia en el bolsillo y opto a plazas que dan opción a jugar la Europa League el año venidero, aunque no se juega. Pero da igual, la ilusión y mi imaginación hacen el resto, y en mi cabeza ya visiono la imagen de mi persona, en un traje hecho a medida, en el césped del estadio de los Juegos del Mediterráneo siendo manteado por Uche, Michel, Corona, Acasiete y compañía después de entrar en Europa. Cerveza, tabaco y algo de dulce me acompañará en mi noche.


Pero una llamada lo tuerce todo. Es Lorena, mi amiga, mi gran amiga. Tiene uno de esos días que tienen las mujeres, y es que por una extraña razón no especificada, está contra el mundo y todo le parece mal. Asumo el papel de "saco" de boxeo y le comento que salgo para su casa. No es la primera vez que lo hago, y es que hace poco que vive sola y muchas veces se ahoga en un vaso de agua. Su casa es pequeña y coqueta, aunque ella es bastante desordenada.

-Abre, soy yo

-Joder Lorena! Vaya pintas me llevas!!
-Cállate que no estoy bien!!!
-Cuéntame anda!!!
-Nada, que Miguel no me hace caso
-Joder con Miguel de los cojones. ¿Cuantas veces te he dicho que este tio va a lo que va?
-Ya..... pero tu sabes que me gusta mucho.
-Ya lo sé, pero ya no tenemos 15 años para ver las cosas con un poco de perspectiva. ¿no crees?
-Si, pero hoy no me la torres
-Hablando de torrar.... Pon algo de lomo al fuego o algo, que vengo canino!
-Hazlo tu
-Voy, quieres algo?
-Dormir!!!!!!!!!!!!!!!
-Vete a la ducha que hoy quemamos la ciudad
-Que dices!!!!
-A la ducha te digo.

Menudo lomazo me hice. Me río yo de los vegetarianos. Mucho amor a los animales, pero son los primeros que chillan y se asquean al ver una adorable y peludita cucaracha. En mi portal hay unos cuantos ejemplares. Las veces que llego afectado por el alchol u otras sustancias, les doy la vuelta, y con las patitas me saludan y les devuelvo el saludo. Podemos estar así varios minutos. Sé que me conocen y en el fondo me aprecian los bichejos estos. Mientras estoy comiendo viendo la tele, sale Lorena del baño, y lo hace desnuda con una toalla en la cabeza. Sabe que soy de confianza (que no gay) y no se corta un pelo.Se va a su cuarto y empieza a vestirse, y como no, a refunfuñar. Que sino tiene ropa, que si esto no le gusta, etc.... Y todo ello, cuando con su ropa podría vestir a todos los habitantes de Guatemala y Paraguay, pero nunca está conforme. Pongo el sonido de la tele para no oirla más, y más se pone a chillar.

-Joder Lorena!!! No me des la murga, que ya tengo a mi madre y a mi novia.
-Qué tal os va?
-Como siempre. Ahí lo llevamos
-Sabe que estás aquí
-No
-¿Por qué no se lo dices?
-Porque se malpiensa, ya sabes
-Joder, es un poco paranoica
-Algo.... aún no te conoce mucho. Poco a poco
-¿Qué hacemos esta noche? ¿Vemos pelis?
-Noooooo, vamos a hacer algo!!!!! Que llevo todo el día en casa.
-Vale, pero donde vamos?
-Podemos ir al pueblo
-¿Habrá alguien?
-Si, mi hermano estará jugando a poker, y sino te apetece bajamos al bar que hay concierto
-Pero siempre hay perroflautas....
-Que más da!!! A nuestro rollo!!!!
-Vale, pero conduces tu
-Siempre igual eh!!!!

En 7 años que lleva con coche, creo que he ido dos veces con ella. Aunque creo que es mejor, se pone muy nerviosa y la lía más al volante que CR en el flanco de Chamartín. Lorena no sabe salir sin taconazos ni maquillada. Y es una pena, porque al natural está perfecta. Pero no hay manera. Y la batalla para luchar contra el colorete en la cara de mi amiga la di por pérdida hace casi un lustro.

Cuando estábamos apunto de salir, Lorena recibe una llamada. Es Marta, una buena amiga suya de su trabajo, algo choni, y le dice para hacer algo. Le cuenta nuestro plan y se une. No pinta mucho la verdad y es que nuestro destino es un bar de pueblo, con música en directo, normalmente de estilo hip/hop, reggae, y el ambiente que se suele destilar en estos sitios. Perros pulgosos, marihuana en grandes cantidades y cervezas a mansalva. Y las tias pues un caso aparte. Las 2 o 3 guapas de cada 100 de esta raza social, llevan peinados raros o braga-faja que les hace perder el interés. Pero almenos, hay buen rollo siempre, por lo que no me importa dejarme ver la frente de vez en cuando y acabo echando unas risas con los lugareños.

Salimos en dirección casa de Marta y Lorena ya mete mano al equipo de música. Es otro de los clásicos en ella. Y como no. Pone la canción del brasileño gay a todo volumen. Si ya de por si, suelo llamar la atención con el coche, con esta canción con el volumen a tope, más aún....




-Joder,  que nos mira todo el mundo. Baja eso!
-Eres un cascarrabias.

Verla sonreír y bailar el "ai se te pego" me tranquilizó. Me gusta verla siempre feliz. Se lo merece.  

-¿Donde vive Marta?
-En Son Gotleu
-Joder con Marta, toda una marquesa
-Eres un clasista
-Claro.... y por eso tengo la novia de donde es
-Es verdad.... sabes el puente?
-Si
-Nos espera ahí
-Ok

Joder con Marta. En pleno noviembre con una falda de palmito y dejando ver unas largas y perfectas piernas. Nos acercamos a ella con el coche. Y aprovecho para decir...

-Menudas piernas!!! ¿A qué hora abren?
-Ahora se lo dices a la cara, valiente. O se lo digo yo!
-Y vuelves andando 

Lo primero que veo de Marta, son las bragas/tanga o lo que llevara. Así si pensé. Las mujeres tendrían que presentarse así cada vez ante mi. Mostrándome sus interioridades bien limpitas y pulcras. Nos metemos en el coche y enfilamos autopista para recorrer los 25 km que nos separan del coche. Ellas no dejan de hablar del trabajo y de movidas que tienen con las demás compañeras. Mentalmente, no dejaba de apuntar en mi lista de cosas que me importan una mierda todos aquellos comentarios que llegaban a mi oído, mientras me concentraba en la carretera. Hacía una noche preciosa. Luna llena. 

Marta es realmente guapa, la típica de 24 años, cani-reciclada aunque conserva su lado malote, un cuerpo de infarto y una cara de comecimbreles nivel 93. Además, siempre habla de sexo y me pone muy guarro. A mitad de camino, se dirige a mi:

-Pedro, que Marta me dijo que tenías novia!!
-Si, me cansé de esperarte
-(risas) Anda que.... yo pensaba que lo nuestro iba en serio

(las pocas veces que coincidiamos era de marcha, y yo ahí solo veo lo que veo).

A medida de que vamos hablando me suelta la frase que marcó la noche. Por desgracia.

-Pedro, ¿tu te metes?
-eh?
-Si te metes y eso.
-Si me drogo? 
-Si
-No que va, me dan asco las drogas y los que se drogan. Son unos cobardes (pensando en que me estaba marcando un tanto con Marta)
-Ah vaya...

Ahí aparece Lorena....

-Pedro, te sabe mal ir a una casa que está en XXXXXX a por una cosita
-Qué cosa?
-Cocaina
-Uffffffffffffffffffffffffffffffff... Pero esto que es!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
-Ya.... pero Marta quiere, además será muy poquita.

La noche cambiaba por completo. Y es que introducir la puta droga trastocaba los planes. Pero bueno, jugaba con la ventaja de que solo aspiraria Marta, si Lorena también le pegara a la cosa fina, directamente no voy. No es la primera vez que entro en un poblado de etnia gitana a por droga. Aunque siempre, digo que será la última. Es todo un mundo aparte, aunque a diferencia de lo que la gente cree, nunca había tenido ninguna experiencia negativa, hasta hoy.

El principal motivo por el que no me gusta ir es si llevo el coche, y es que conducir por las estrechas calles del poblado está declarado como alto riesgo, y no el Betis-Sevilla, y es que además de estrechas por ahí puede aparecer cualquier cosa. Un niño corriendo (si, a la 1 de la mañana aun corretean), pisar una caja con un ioki dentro y mil cosas más.

Aparcamos y Marta no quiere bajar sola. Manda huevos. Quien quiera peces que se mojé el culo. Pero Lorena, que de buena que es tonta, accede a bajarse con ella y recorrer los 25 metros que nos separan de una casa que vende material. Yo acepto a regañadientes esperarlas, aunque les dije que se den prisa, que gracia no hace. Al quedarme solo, enchufo los auriculares al equipo de música y desconecto un poco de la situación. Pero poco duró.

-Plas plas (ruido de dar una fuerte palmada al cristal)

Logicamente, me asusto y miro con cara de acojonao. Es un hombre de raza gitana que me dice que baje la ventanilla. Le digo que no con el dedo, mientras siento como mi estómago me hace cosquillitas. Finalmente, accedo a bajar la ventanilla, más que nada, porque no tengo otra.

-¿Si? Dime
-No será secreta, no?
-No, no, estoy esperando a unas amigas
-Y pa que llevas los auriculare? Como sea secreta te quito la via payo.
-No no, de verdad, solo vengo a acompañar. De verdad.
-Bajate del coche
-Para que?
-Te bajas tu o te bajo yo?
-Voy, voy

Bajo del coche y me cachea. Joder. Menudo paranoico el tipo. Saca mi d.n.i y tiene huevos a decirme que lo tengo caducado y que vaya a renovarlo. La situación es surrealista. Me está cacheando alguien que de legal no tendrá ni el apellido. Pero lo que es peor, aunque imagino que lo más sensato, es que le hago caso cual sumiso. Es de las pocas veces que siento el miedo, y la verdad es que no se pasa nada bien. Interiormente me cago en Marta. Espero que por lo menos, me la chupe.

-Ven acompañame
-A donde?
-Que me acompañeeeee

(El gitano ya está de buen rollo, aunque sigue siendo prepotente. Lo que el dice, va a misa).

-Tienehh que hacerme un favor.
-Pero me tengo que ir ya de verdad.
-Que "bengas" he dichooooo

No sé ni como, pero termino entrando en una chabola. Son casi las 2. Cruzo la casa y accedemos a un patio lleno de gallos sueltos.

-Tienes que ayudarme a meterlos en la jaula.
-Pero si casi no se ve. AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH. Pican!!!!
-Aro que pican payo. Son peliadores. Por eso tienes que alludarme, que sino se me escapan y la lían
-Pero con guantes o algo, no?
-Que baaaaaaaaaaaaaaa

Patio. 4x4. Gitano 1,80 -120 kg. 6 gallos de pelea y servidor. Objetivo: Meterlos en una jaula. Más oxidada que la cintura de Puyol. No sabía si reir o llorar en ese momento. Pero me dispuse a terminar rápido con aquello y fui con todo a por los gallináceos. Como se aferraban a la libertad los muy cabrones y es que no dudaban en dar fuertes picotazos. Menos mal que la ropa de abrigo me protegia mucho, sino eso hubiera sido una carniceria. En 5 largos minutos conseguimos el objetivo. Entramos y analizo mi situación. Chaqueta completamente destrozada, pantalones con agujeros y manos ensangrentadas.

-Joer payo, parese que vienes de la guerra (risas)
-Si, me voy a ir yendo, que estas heridas no tienen muy buena pinta
-Espera hombre, que tendré que darte argo por la ropa, no?
-Es igual, no te preocupes
-Que no, vente paca

Me la sudaba el abrigo, la sangre y todo. Quería irme. Y desde el portal ya veía a Marta y Lorena fuera del coche a unos 50 metros. Me miraban preocupadas. El gitano saca la cartera y me suelta dos billetazos de 200 €. Me niego a aceptarlos. Insiste hasta ponerse violento. Los cojo y me voy.

-¿¡Donde estabas?? ¿?Que te ha pasado??? ¿Y ese dinero???
-Vamonos ya Lorena!!!

Les cuento la historia y no daban crédito a lo que oían. Aunque vista mi pinta, no dudan de mi veracidad en la lucha ante los gallitos. Me proponen dar por finalizada la noche, pero no. El salir vivo de la situación me hace más fuerte y enfilamos por fín camino al pueblo, con parada obligatoria en casa de mi hermano, donde me cambio y me lavo las heridas. Aprovecho también para hacer un par de manos en la timba que tiene montada en casa, palmando 50 € en pocos minutos.

Cuando estaba nuevamente en el baño, toca Marta, se está meando y no puede esperar. Le abro, pero le digo que se espere un minuto, que estoy con la herida. Pasa de mi, entra corriendo, se sube la falda y se baja las bragas, puedo confirmaros que son bragas. Y se pone a mear. Mientras se prepara una raya de coca.  A ver si te da un chungo pensé. Puta droga. La que me has liado.

Me vuelve a dar las gracias por todo, y me dice que si necesite algo no tengo nada más que decirlo. Ella sigue sentada en la taza, yo a su lado mirándome en el espejo, le guiño el ojo y le señalo mi entrepierna. No lo hago con ninguna intención. Siempre he sido asi con ella. Pero esta vez, me vio el farol, y me baja los pantalones y se lleva mi pieza a la boca, que reposaba sin izar debido a la sucesión tan rápida de los hechos. Joder. Me la estaba chupando Martita. Uno de mis iconos sexuales. Cuando ya estaba empalmando, Lorena toca a la puerta. Venga salid ya que nos vamos!!!!!

Se quita la polla de mi boca. Me besa. Que asco pensé, pero es  mi polla y la beso cuando quiero, y después me dice al oido. Después terminamos la faena. Los cojones. Después se ha liado con un provinciano en el bar que nunca teníamos ido  y le estará, en estos momentos, comiendo el falo rural. Y aquí estoy, en casa de mi hermano, escribiendo desde el portátil, con Lorena dormida en mi tripa y con un calentón nivel 97 pensando si restregarme un poco en mi amiga para correrme.


1 comentarios:

gallo serrano dijo...

Me gustó. Tiempo bien invertido, el que he dedicado a leerlo, y a pesar de que seguro que se me ha requemado la salsa de tomate. Te dejo.

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...